Cómo un detector de fugas de aire le ayudará a optimizar sus sistemas de aire comprimido

Los sistemas de aire comprimido son fundamentales para muchas instalaciones de producción y procesamiento. Los compresores generan un flujo de aire adecuado a través de múltiples ramales de tuberías de distribución, llegando a una gran variedad de equipos críticos. Por lo tanto, el mantenimiento de los sistemas de aire comprimido es esencial para garantizar su correcto funcionamiento y minimizar el desperdicio de energía.

Las fugas y el desperdicio son dos consideraciones principales para evaluar el estado de un sistema de aire comprimido.
Las fugas y el desperdicio son dos consideraciones principales para evaluar el estado de un sistema de aire comprimido.

Fugas en los sistemas de aire comprimido

Las fugas de aire son situaciones frecuentes que resultan en el desperdicio de aire comprimido y en la operación innecesaria del compresor. La red de tuberías de distribución de aire comprimido suele ser extensa y se extiende por toda una instalación, con numerosas uniones y puntos de conexión. Cada una de estas interfaces presenta un potencial de fuga. Las fugas en los sistemas de aire comprimido ocasionan un significativo desperdicio de energía y costos, incluso si el sistema logra mantener el punto de ajuste. Asimismo, las fugas provocan un funcionamiento innecesario del compresor, lo que resulta en un mayor desperdicio de energía, un incremento en los costos y un desgaste prematuro del equipo. Si el caudal de fuga se vuelve excesivo, puede comprometer la capacidad de los compresores para mantener la presión requerida del sistema, lo que puede resultar en la degradación del equipo y posibles problemas de calidad.

El mantenimiento de los sistemas de aire comprimido y la detección de fugas son cruciales para el éxito en la fabricación y el procesamiento, por lo que deben priorizarse.

Mejorar el rendimiento de los sistemas de aire comprimido no se limita únicamente a la localización de fugas y al mantenimiento de un sistema en buen estado. Estudios realizados por organizaciones como el DOE de EE. UU. se han centrado de manera significativa en la gestión de las fugas en los sistemas de aire comprimido. Esto se debe a que las fugas en los sistemas de aire comprimido desperdician energía (generando un aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero) y conllevan a mayores costos operativos.

Desperdicio en los sistemas de aire comprimido

Un sistema de aire comprimido se compone de dos aspectos principales: el lado del suministro y el lado de la demanda. El lado del suministro representa la capacidad de producción del sistema, mientras que el lado de la demanda representa los requisitos del equipo conectado para funcionar de manera óptima. El objetivo al diseñar un sistema de aire comprimido para una instalación es equilibrar el suministro y la demanda, asegurando que la demanda se satisfaga con la capacidad necesaria para una futura expansión, evitando que una capacidad excesiva genere ineficiencia. Un compresor sobredimensionado también puede desperdiciar energía.

Según el DOE, los sistemas de aire comprimido pueden perder entre el 20% y el 30% de su producción únicamente a causa de las fugas. Esto plantea un desafío, ya que no solo se desperdicia energía —la cual debe pagarse independientemente de su uso— sino que el sistema a menudo debe compensar la producción perdida. Esta compensación suele requerir un aumento en la producción y el caudal para satisfacer la demanda, o de lo contrario, el sistema permanecerá desatendido. Por lo tanto, el objetivo siempre debe ser disminuir la intensidad energética y aumentar el caudal de producción. Por ejemplo, los estudios indican que una fuga de aproximadamente 1,6 mm, con un caudal de tan solo 0,18 m³/min, puede costar más de 1 000 € anualmente. Esto ilustra el significativo impacto financiero que puede tener incluso una fuga muy pequeña y de bajo caudal.

Lista de verificación para la optimización del rendimiento del sistema de aire comprimido

En la publicación «Mejora del rendimiento de los sistemas de aire comprimido», organizaciones como el DOE/CAC proporcionan una lista de verificación exhaustiva para establecer un programa de prevención de fugas. Este programa ayuda a las empresas a minimizar el impacto de las fugas en sus sistemas de aire comprimido. La lista de verificación incluye los siguientes 10 elementos (para obtener más detalles, consulte la guía):

  • Establecer el uso base de aire comprimido
  • Determinar la pérdida por fugas
  • Calcular el costo de las fugas de aire
  • Identificar las fugas
  • Documentar las fugas
  • Priorizar la reparación de fugas
  • Ajustar los controles
  • Documentar las reparaciones
  • Comparar los valores de referencia y publicar los resultados
  • Repetir el proceso

El detector de fugas de aire moderno: Cámara acústica Fluke ii905

Cámara acústica Fluke
Cámara acústica Fluke

Como parte de las iniciativas para promover la eficiencia energética, las organizaciones suelen proporcionar herramientas que ayudan a las empresas a evaluar su rendimiento energético. Una de estas herramientas es la cámara acústica Fluke ii905, la cual facilita el cumplimiento de varios requisitos de la lista de verificación, como la determinación de la pérdida por fugas, la determinación del costo de las fugas de aire, la identificación, la documentación de las mismas y la priorización de las reparaciones.

Cualquier empresa que utilice un sistema de aire comprimido puede beneficiarse al seguir estas directrices para reducir el desperdicio y optimizar la eficiencia de su sistema. No es el tamaño de la empresa, sino el tamaño de las fugas, lo que determina la eficacia de este programa para una compañía determinada. Estos sistemas fueron instalados con la expectativa de una larga vida útil bajo condiciones de presión exigentes, por lo que merecen un mantenimiento adecuado.

Chatee con nuestroasistente de Fluke
Borrar el chat