Durante la resolución de problemas o la realización del mantenimiento de un equipo en un entorno industrial, proteger su seguridad depende en parte del entorno y en parte de usted. Asegúrese de que el equipo esté utilizándose respetando las especificaciones correspondientes para evitar que se produzcan daños o lesiones debido a sobrecalentamientos, usos no acordes con las especificaciones o problemas de calidad del suministro eléctrico. Si es usted el responsable de que el equipo funcione correctamente, inspeccione y solucione los problemas del equipo respetando la distancia de seguridad.
La utilización de una cámara de infrarrojos puede ayudarle en ambas tareas. Puede utilizarla para explorar equipos, estructuras y procesos a una distancia de seguridad, lo cual le permitirá reducir su exposición a peligros y, en algunos casos, puede evitarle la necesidad de tener que obtener permisos para trabajar expuesto al calor.
A continuación se indican unos cuantos ámbitos en los que una cámara termográfica puede ayudarle a permanecer seguro:
Inspección de sistemas eléctricos
Mediante el uso de una cámara de infrarrojos puede permanecer alejado de la zona de arcos eléctricos y explorar equipos con tensión mediante ventanas especiales de infrarrojos sin necesidad de abrir el cuadro. Esto permite reducir riesgos y es posible que le posibilite reducir la cantidad de equipos de protección personal que debe utilizar.
Entornos potencialmente explosivos
El uso de una cámara termográfica con lente teleobjetivo puede permitirle permanecer a una mayor distancia del equipo en entornos potencialmente explosivos y obtener el nivel de detalle necesario. Esta exploración a distancia también le permite evitar tener que subirse a torres de inspección, torres o limpiadores de aire e inspeccionar áreas a las que no podría acercarse lo suficiente sin interrumpir la producción.
Inspección de edificios
Las capacidades de inspección a distancia de la cámara de infrarrojos con lente gran angular o teleobjetivo también le permiten explorar tejados, techos, paredes o conductos del suelo. Esto permite reducir las posibilidades de caídas desde los tejados y acelerar las inspecciones.